¿Debo orinar después de tener sexo? ¿Mito o realidad?

Todo el mundo dice que orinar después del sexo es necesario para evitar enfermedades. Aquí te decimos si esto es verdad o no. 

Seguramente has escuchado muchas veces la recomendación de qué hay que orinar después de tener relaciones sexuales, o de lo contrario corres el riesgo de contraer una infección del tracto urinario o ITU, pero ¿te has preguntado si ésta práctica es algo real o simplemente otra leyenda urbana sin ningún sustento científico?  

Para aclarar el misterio nos dimos a la tarea de investigar a profundidad y darte una respuesta confiable. 

De acuerdo con Planned Parethood no hay evidencia científica concreta de que exista un vínculo significativo entre las infecciones urinarias y orinar después de las relaciones sexuales. Lo que significa que aún cuando hagas pipí después de tener sexo con penetración, existe una buena posibilidad de que realmente no estés haciendo mucho más que aliviar tu vejiga.

También es súper importante entender cómo se puede contraer una infección urinaria: Una infección urinaria ocurre debido a una infección ascendente, donde las bacterias del área anal y / o vaginal suben a la uretra y entran a la vejiga. Por lo tanto, es una creencia común que orinar después de tener relaciones sexuales eliminará cualquier bacteria y evitará que viaje a la vejiga. Sin embargo, esta creencia no está 100% respaldada por la ciencia.

Entonces, ¿debemos hacerlo?

La respuesta científica es no, sin embargo, hay algunas mujeres que sienten la necesidad de orinar después del sexo y necesitan hacerlo, mientras que hay otras que pueden quedarse cómodamente dormidas o reanudar cualquier actividad después del sexo, sin orinar.

Así que sientes la necesidad de orinar, definitivamente debes hacerlo, ya que retener la vejiga durante demasiado tiempo sí puede ponerte en riesgo de contraer una infección urinaria.

En conclusión, lo que realmente ayuda a evitar una ITU son los buenos hábitos de higiene antes y  después del coito, recordemos que al momento de mantener relaciones sexuales, hay mucha secreción, por lo que las bacterias se mueven y pueden subir a la uretra y a la vejiga.